«Estamos desesperados»: los familiares de Ramón Vivas, quien se arrojó al agua el lunes pasado permanecen junto al río aguardando que Prefectura intensifique la búsqueda del cuerpo. «No queremos volver a casa sin él. Sino nos parece que lo abandonamos» dice su hija Lorena.

Sigue sin aparecer el cuerpo de Ramón Vivas. Tristeza y conmoción invaden a familiares y amigos que aguardan, junto al río en la bajada San Luis, que la búsqueda del cuerpo dé algún resultado ya que se ha visto varias veces interrumpida por la inclemencias del tiempo.

Alrededor de las 18 horas de la tarde de este pasado lunes, un hombre que posteriormente fue identificado como Ramón «Monchi» Vivas, de 63 años, se arrojó a las aguas del río Paraná en la zona de la bajada San Luis en San Lorenzo.

Vivas, un trabajador de la Municipalidad de San Lorenzo que se desempeñaba en el área de hormigón en obras públicas, llegó al lugar  y según los testimonios de algunas personas que estaban pescando tomó la terrible decisión de tirarse al agua. Decisión que según su hija Lorena, es «incomprensible para nosotros» asegura. «No dejó ninguna carta, no dio ningún aviso. Estuvo trabajando hasta el día anterior»

El operativo de rescate comenzó a últimas horas de la tarde del lunes e involucró a Prefectura Naval, Bomberos Zapadores y efectivos policiales. Las maniobras debieron ser interrumpidas por las pésimas condiciones climáticas imperantes  Una embarcación de Prefectura continuó rastrillando la zona sin resultados hasta el momento.

«Pero los esfuerzos no son suficientes» indica la familia que está desesperada.

«Estuvo tomando mate con mi mamá hasta antes de salir para el río» dice Lorena y le parece extraño que nadie vio a su papá en el trayecto desde su casa ubicada en la zona del cementerio de San Lorenzo.

Lorena, hija de Ramón Vivas en diálogo con «Un día de Gloria» pide «por favor que Prefectura no abandone la búsqueda». «No queremos volver a casa porque parece que abandonamos a mi papá»