
La situación en el sector gastronómico es grave. Según testimonios de Luchi Casa de Comidas, las ventas en la rotisería cayeron un 50% con respecto a años anteriores. Esto significa que se vendió la mitad de lo que se vendía en el mismo período en años pasados.
A esta preocupante situación se le suma el impacto de los aumentos en los insumos, lo que agrava aún más la crisis que enfrenta el sector. Los dueños y empleados de las roticerías están sintiendo los efectos de esta situación y buscan encontrar formas de adaptarse a la nueva realidad.
La caída en las ventas y el aumento en los costos pueden tener consecuencias graves para la supervivencia de muchos negocios del sector gastronómico.
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