En una histórica tratativa de más de 22hs en el Congreso, el proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana catorce, obtuvo 129 votos a favor contra 125 en contra y una abstención.
Trás el salto político de la iniciativa en el recinto de la cámara baja, el debate se traslada a Senadores en donde puede recibir la sanción definitiva, ser modificado o rechazado de plano.
Sobre un polémico final, la pantalla marcaba 131 a favor sobre 123 y una abstención. Pero inmediatamente un grupo de diputados empezó a exclamar que estaba mal marcado ya que supuestamente había cinco diputados/as que no le había marcado el voto, hecho que se constató y los votos faltantes eran solamente 2, quienes correspondian a Monzó quien no votó, y a Julio De Vido que está preso.
Pero no terminó ahí. Elisa Carrió quien nos tiene acostumbrados/as al escándalo pidió la palabra, lo que fue rechazado por la oposición, que le reclamaba que no había asistido a todo el debate: «Hace veinte horas que estamos acá», le gritaban. La diputada tuvo una muy breve intervención pero sin embargo pasó de desapercibida ante un recinto que festejó eufóricamente la aprobación.
Hasta el momento, la sesión sigue tratando la aprobación de los 22 puntos del proyecto de ley.
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